No habrá un único motivo, ni será sencillo de desentrañar, pero es todo un misterio cómo nuestro equipo es capaz de ofrecer versiones tan opuestas en apenas tres días. El mismo equipo que desarboló al Alba de Berlín el miércoles y que en el último mes ha vencido con justicia a grandes rivales como Khimki o Valencia Basket pasa a ser un pelele en manos de contrincantes que nos arrollan como pasó en Las palmas, hace diez días en Lituania y hoy en Tenerife.
“No hemos tenido ningún acierto en tiros libres ni en triples y estos fallos nos están afectando en demasía. En la primera parte nos sujetamos por la defensa. En el tercero y en el último cuartos, cuando hemos visto que seguíamos sin meter, hemos desconectado también en defensa”, explicaba Jota Cuspinera en la rueda de prensa tras el partido. Y fue en ese tramo final donde una derrota dura se transformó en un palizón con el 96 – 50 final.
“Es en los momentos de frustración cuando hace falta hacer más piña y ser más equipo”. Es un mensaje que también ha querido trasladar nuestro entrenador, tanto en el vestuario como ante los periodistas. “El problema es si te obsesionas por fallar. Mi trabajo es descubrir las razones de estos picos de sierra”, reflexionaba Cuspinera ante los periodistas tras hablar con los jugadores en el vestuario en una charla que él mismo calificaba como dura pero también de cercanía.
Otro viaje de vuelta desde las Islas Canarias rumiando un partido horroroso y mañana regreso al tajo. El martes hay que subirse de nuevo al avión para jugar el miércoles en Moscú frente al Khimki (17:30 horas, La Otra), regresar el jueves y a partir del viernes preparar el importante partido del domingo en casa frente al MoraBanc Andorra (12:30 horas). Y en todo momento resonando esa frase clave: es en los momentos de frustración cuando hace falta hacer más piña y ser más equipo”.
Departamento de Comunicación del Montakit Fuenlabrada.
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