El Urbas Fuenlabrada estuvo muy distante de su mejor versión y cayó derrotado en Las Palmas de Gran Canaria 87 – 71. Los locales, que mandaron siempre en el partido, sentenciaron en los primeros compases del último cuarto con su acierto triplista.
14 de diciembre de 2020
Con la sensación de que nunca llegamos a entrar en el partido, nos quedamos fríos con la actuación del Urbas Fuenlabrada anoche ante el Herbalife Gran Canaria. Desde el inicio un paso por detrás en el juego y por ende en el marcador. Si bien estuvimos casi siempre a tiro y no fue hasta el último cuarto cuando los locales abrieron brecha en el electrónico.
Y es que alcanzado el minuto 31 el marcador era 63 -57, es decir, todo estaba abierto a pesar de que las buenas vibraciones no acababan de llegarnos. Era el momento de dar un paso al frente o de que nos echaran a un lado. Ocurrió esto último con una racha de triples de los amarillos que pusieron una ventaja superior a la decena y ante la que no tuvimos capacidad de reacción.
Previamente ya habíamos tenido que remontar una situación complicada, pues su mayor intensidad había proporcionado una renta suculenta a los isleños con Okoye como estilete principal (37 – 24, minuto 18). Fue el mismo Okoye quien con un par de triples frenó nuestra reacción a caballo entre la primera y la segunda mitad. Del esperanzador 41 – 38 pasamos al 47 – 38 que devolvía la confianza a los amarillos. Una confianza que acabarían traduciendo en una clara victoria.
Hoy nos acompañará el amargo regusto en el vuelo de vuelta a casa, pero sin tiempo para lamernos las heridas retomaremos los entrenamientos esta misma tarde ya con la vista puesta en el choque del domingo a las 20:00 horas en casa ante el Retabet Bilbao Basket. Otro rival directo ante el que deberemos mostrar otra cara.
Departamento de comunicación del Urbas Fuenlabrada.
Imagen de acbphoto / M. Henríquez. |
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