El Urbas Fuenlabrada protagonizó un errático encuentro ante el Unicaja y acabó perdiendo 53 – 73. Tan errático como que hicimos la peor anotación en casa de nuestra trayectoria en ACB. Desafinados, con tintes de ansiedad en ataque y desajustados en defensa en una primera mitad que supuso una gran decepción para todos, jugadores, técnicos y aficionados.
El 19 – 41 que mostraban en el intermedio los vídeo marcadores del Fernando Martín eran el reflejo de nuestro desacierto ofensivo. Algunas veces por malas decisiones, otras ocasiones por errores en tiros bien trabajados, algunas más por pérdidas causadas por mala coordinación. El caso es que fuimos desperdiciando un ataque tras otro.
No era cuestión de no querer. De hecho, ya en el descanso llevábamos nueve rebotes en ataque. Los sumamos porque los buscamos. Los jugadores no se escondían, más bien pecaban de exceso de precipitación por querer anotar en posiciones muchas veces forzadas.
Otra cosa era en defensa. Si no metes, has de redoblar el esfuerzo atrás. Pero la desazón por no anotar se fue trasformando en desánimo defensivo. Nos faltó carácter para rebelarnos desde la defensa.
El orgullo salió tras el descanso. Ahora sí, actividad en defensa. Ahora sí, acierto en ataque. Y en cinco minutos parcial de 16 – 2 para incendiar el pabellón con un ilusionante 35 – 43. Logró atemperarse el Unicaja y frenó nuestra remontada. Pero el partido estaba vivo: 40 – 50 al final del tercer periodo.
No pudimos acentuar el agobio sobre el rival. Quizá pecamos de ansiedad por querer completar la remontada demasiado rápido y seguramente acusamos el cúmulo de minutos y de partidos en las piernas. No en vano era nuestro sexto encuentro en 20 días tras el brote de covid. Con pausa y la seguridad de una renta en torno a la decena, los visitantes supieron gestionar el tramo final del choque para acabar venciendo con merecimiento.
A nosotros nos toca levantarnos tras los últimos tres malos partidos. De repente, nos hemos quedado secos en anotación. 60 puntos hicimos el domingo en Las Palmas y 53 ayer. Da la sensación de que este paréntesis que ahora afrontamos sí nos puede sentar bien para recomponernos. Lo veremos a partir del sábado 5 de marzo cuando visitemos al Baxi Manresa y demos inicio al tercio final y decisivo del campeonato.
Departamento de Comunicación del Urbas Fuenlabrada.
Foto de Alba Pacheco. |