“Nos vamos a encontrar un equipo que, igual que nosotros, necesita ganar. Solo lleva dos victorias y muchas derrotas seguidas, así que un equipo peligroso, con mucha necesidad y mucha hambre. Ni su situación ni la nuestra son buenas, seguramente no será un partido demasiado bonito porque no somos dos equipos que estemos en un estado de forma bueno. Nos vamos a encontrar un partido duro, muy intenso, de contacto y de golpe”.

Un partido también de paciencia

“Sí, seguro, porque ellos son un equipo que anota pocos puntos, pero que tampoco recibe demasiados. Sus marcadores suelen ser bajos, un equipo que compite y aunque le saquen distancia vuelve a agarrarse al partido. Por tanto, la paciencia será imprescindible. Nos tenemos que dedicar a salir al cien por cien desde el primer segundo y cien por cien con mentalidad ganadora todos. Ese es el objetivo”.

¿Cuáles son sus jugadores clave?

“El Clavijo es junto al Tizona seguramente el equipo que más jugadores españoles tiene, creo que son un buen grupo, no tienen ningún jugador que destaque mucho por encima del resto porque son un grupo de doce jugadores con los minutos muy repartidos. Jenaro cambia quintetos, puede jugarte con dos cincos, con dos cuatros, con tres pequeños, con varios manejadores… es un equipo muy versátil en ese sentido y dotado de mucha carga táctica tanto en defensa como en ataque. En nombres propios, te destaco a Javi Nicolau porque me cae muy bien, está haciendo un temporadón y va a seguir yendo hacia arriba”.

¿Cómo ha reaccionado el equipo tras la derrota contra el Lleida?

“Las reacciones son buenas, el grupo está unido y sigue trabajando y peleando. Podemos hablar mucho y positivamente de la semana de entrenamientos, pero lo que tenemos que hacer es jugar con el foco al cien por cien y disputar los partidos con el máximo nivel competitivo que tenemos, que es mayor que lo que hemos mostrado en los dos últimos encuentros”.

¿Cómo abordar esos momentos de cierta parálisis, cómo solucionar esos últimos minutos del segundo cuarto en Burgos que marcan el partido o el arranque del tercer periodo contra el Lleida?

“Tenemos que crecer en nuestra fragilidad mental, que es algo que estamos enseñando más veces que las que nos gustaría. Ya no es jugar bien o mal, sino desaparecer de los partidos. Estamos trabajando mucho en el aspecto de los distractores, en el aspecto de ser más fuertes mentalmente, de agarrarnos a anclajes tácticos y técnicos en un momento dado del partido. Si no nos están saliendo bien las cosas, hemos de saber por dónde hemos de ir en lo mental y en lo táctico y aportar soluciones. Entonces, se aborda a partir de identificar lo que haces mal y a continuación dando soluciones y herramientas al equipo. En eso estamos”.

Departamento de Comunicación del Baloncesto Fuenlabrada.